Murió Joe Cocker y con él una parte de la música del SXX. Un cantante de Soul blanco que triunfó en un mundo que ya no quería escuchar más Soul y buscaba sonidos nuevos después de Otis Redding o de Marvin Gaye. Un cantante que mejoró canciones escritas por otros en las que, mágicamente, la copia superaba al original.
Todo gracias a esa portentosa voz rasgada, profunda, potente… esa voz rota que transmite energía, fuerza y emoción. La voz que tienen l@s Janis Joplin, Bonnie Tyler, Stevie Nicks, Michael Bolton, Anita Baker… Esas voces imposibles de imitar sin acabar con una afonía total. Voces raras y únicas. Joe Cocker era de esas gargantas privilegiadas que a pesar de gritarnos las notas y aullar los sonidos no necesitaban ni whisky ni miel. Aunque sí, no nos engañemos, Joe le dio también a éstos... probablemente mucho más al néctar del barril que al del panal de abejas… El exceso y lo excesivo, en el canto y en la vida.
Se nos han ido memorias adolescentes de "Aquellos Maravillosos Años" ochenteros en que veíamos fluir la nostalgia mientras sonaban los primeros compases de “With a little help from my friends”.
Se nos han ido memorias adolescentes de "Aquellos Maravillosos Años" ochenteros en que veíamos fluir la nostalgia mientras sonaban los primeros compases de “With a little help from my friends”.
Todas las chicas de nuestra edad han deseado que vaya a buscarlas Richard Gere en moto, vestido de uniforme blanco, mientras suena “Up where we belong” en Oficial y Caballero.
Y chicos, ¿quién no ha soñado con ser Mickey Rourke mientras Kim Bassinger le baila un privado al son de “You can leave your hat on”? La canción de la afamada Nueve Semanas y Media quedará por siempre asociada a ese baile que tanto nos gusta llamado sptriptease.
Murió Joe Cocker el cantante indomable, de la camiseta desteñida de Woodstock, el hippy inglés que vestía las botas con estrellas americanas, colocado, desmelenado y con patillas en aquel año 69.
Murió el cantante también de grandes baladas con timbre profundo, como ese “You are so beutiful” que emociona sin remedio, o el cantante que desata esa fuerza tremenda en “Unchain my Heart”. Se nos fue parte de nuestra vida en canciones... Y se fue a lo grande. Hasta el año pasado ahí estuvo subido al escenario.
Pues si os queréis llenar de Joe Cocker, os dejo el video de un concierto entero (1 hora y 30 minutos) que es sencillamente espectacular... Rock, baladas, grandes éxitos, gospel, fantásticos músicos y esa voz que lo llena todo... Auténticas maravillas como una versión de "Many Rivers to Cross" (minuto 14) para enmarcar.
Pues si os queréis llenar de Joe Cocker, os dejo el video de un concierto entero (1 hora y 30 minutos) que es sencillamente espectacular... Rock, baladas, grandes éxitos, gospel, fantásticos músicos y esa voz que lo llena todo... Auténticas maravillas como una versión de "Many Rivers to Cross" (minuto 14) para enmarcar.
Cuando se escucha a Joe Cocker en vivo es cuando uno se da cuenta de que sí, que era bueno, muy bueno. En directo no hay trampa ni cartón y ahí es donde Joe se crecía y sacaba todo los que llevaba dentro.
Joe Cocker. Descomunal, excesivo, indomable y único.
Joe Cocker. Descomunal, excesivo, indomable y único.